Si conectas el teléfono al vehículo y la batería no se carga o comienza a agotarse, intenta las siguientes soluciones.
Muchos puertos USB para autos solo proporcionan una pequeña cantidad de energía. La mayoría de los teléfonos más recientes admiten una o más tecnologías de carga rápida como Quick Charge 3.0 y se combinan mejor con un cargador para auto (también se conoce como cargador de encendedor de cigarrillos) que admite la misma tecnología de carga rápida que tu teléfono.
Te sugerimos que busques en línea un cargador rápido para auto que sea compatible con el modelo específico de tu teléfono y selecciones uno con buenas reseñas.
Cuanto más brillante sea la pantalla, más batería consumirá el teléfono. Cuando uses la app para socios, configura el brillo de la pantalla para ver con claridad.
Si las soluciones anteriores no ayudaron a cargar el teléfono, es posible que debas comprar un cable de carga nuevo. Te recomendamos conseguir uno reforzado y más grueso.
Una batería portátil te permite cargar el teléfono cuando estés lejos de tu vehículo, por lo que siempre tendrá carga cuando lo necesites.
Cualquier tipo de adaptador para conectar un cable a tu teléfono puede ralentizar la carga. Por ejemplo, un cable micro USB con un adaptador USB-C puede cargar más lento que un cable USB-C (especialmente si es un adaptador de baja calidad).
No todos los cables de carga con puerto USB funcionan igual. Según el fabricante, los cables de carga rápida varían en la rapidez con la que cargan diferentes dispositivos, lo que significa que algunos cables de carga rápida no funcionan tan bien como otros.
Para asegurarte de que recibes la carga más rápida posible, te recomendamos que compres un cable de carga rápida compatible con el modelo de tu teléfono.
Cuando el teléfono se carga, una parte de esa energía se usa para las tareas y apps que se ejecutan en segundo plano en tu dispositivo. Fuerza el cierre de cualquier app que no uses para que el teléfono se cargue más rápido.